Un elemento clave del e-Commerce es que el usuario o cliente encuentre el producto que busca con facilidad y así, pueda comprarlo.
Los productos no deben lanzarse al mercado sin antes ser sometidos a un intenso estudio, con el objetivo de conocer a detalle las condiciones para que su éxito sea rotundo.
Cada paso tiene un grado de dificultad, por lo que el profesional del marketing debe ser extremadamente cuidadoso con sus estrategias, comenzando con la clasificación del producto.
Existen por lo menos cinco categorías para distinguir un producto de otro. Recuerda que también debes ordenar tu catálogo de tal forma que el cliente no tenga complicaciones al realizar la búsqueda. ¡Toma nota!.
Nuevos. Se trata de aquellos productos que se ubican en etapa de lanzamiento y que esperan la respuesta del consumidor sobre sus características.
Estrella. Los productos estrella resaltan por el boom que tienen en ventas al momento de su lanzamiento, hasta que sale un producto superior. Sin embargo, también están aquellos que se mantienen vigentes durante años como la estrella en su segmento. Tal como el iPhone de Apple o el Galaxy de Samsung.
Temporada. Los disfraces para halloween o las rosas para el 14 de febrero son ejemplos de este tipo de producto que se vende sólo durante un intervalo específico.
Seguidores. Estos productos también destacan en su segmento, pero siempre detrás de los estrella, por ejemplo las tabletas electrónicas y los drones.
A la baja. No consideraron las necesidades del consumidor sino que surgieron por moda o son productos con versiones que se actualizan cada año; por ejemplo los Smartphones, que se renuevan constantemente.
Recuerda que las categorías que sólo tienen etiquetas y cabeceras no satisfacen las expectativas de los usuarios. En las categorías también debe poder hacerse click y llegar claramente a una relación de subcategorías. Cuando ocurre esto, los usuarios tienen un mejor manejo de las mismas, lo que les permite seleccionar un ámbito más especifico para centrar su búsqueda. ¡Suerte!