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El metaverso y las marcas llegan a revolucionar el mundo tal y como se conocía hasta ahora. Mediante este espacio virtual alternativo, los ciudadanos podrán trabajar, comprar, relacionarse o pasar su tiempo de ocio como deseen, prácticamente sin limitaciones. Las marcas coexistirán con nosotros, enriquecerán el entorno. Desaparecerá la barrera entre lo físico y lo digital; diremos hola a lo phygital.
Las barreras que separan lo físico de lo digital son cada vez más difusas. Desde el anuncio de la llegada del ya famoso metaverso, son muchas las marcas que se lanzan a este nuevo entorno virtual, todavía desconocido pero prometedor. Sin embargo, no sólo las empresas están apostando por este fantástico universo, sino que la sociedad quiere estar atenta a lo que ocurre (y comienza a mostrar su interés por entrar en él).
Metaverso y las marcas
De hecho, según Gartner, en 2026 el 25% de la población pasará al menos una hora al día en el metaverso. En él, realizarán actuaciones como comprar, trabajar, interactuar con otras personas o incluso disfrutar de diferentes tipos de ocio. Este universo dará lugar a la creación de nuevos modelos de negocio y alcanzará, como informa Bloomberg Intelligence, un valor de 800.000 billones de dólares en 2024.
En este sentido, SAS, proveedor de software y soluciones de analítica, señala que las marcas están empezando a reaccionar. Y, pretenden aumentar su presencia en el metaverso para estar “más cerca” de los consumidores. Para tener éxito en este espacio virtual, SAS destaca tres aspectos clave que las empresas deben tener en cuenta: la omnicanalidad, la personalización y el uso de la IA y la analítica avanzada en tiempo real para interactuar con los clientes.
El metaverso está transformando la sociedad de consumo porque permitirá a las marcas ofrecer experiencias envolventes y multisensoriales a los consumidores. Lo que dará lugar a experiencias únicas. Si las estrategias omnichannel deben ser ya protagonistas, con el metaverso es aún más importante. Que se integren plenamente con el resto de canales, para que la estrategia en su conjunto sea coherente y esté cohesionada.
