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El jueves pasado se presentaron las cuentas de Alibaba durante el primer ejercicio fiscal. El resultado evidencia el estancamiento que ha tenido la empresa por la aparición del coronavirus, lo que se relaciona con que no habrá por vez primera crecimiento en el gigante asiático, puesto que los ingresos del lapso se mantienen latentes desde un año a otro.
Se conoce que esta empresa dedicada al comercio electrónico ha logrado facturar unos 30.689 millones de dólares, esto durante los meses de abril y junio de 2022, por lo que la variación interanual de los ingresos es inexistente (0%).
Es relevante destacar que estos datos proporcionados son optimistas y cumplen con los objetivos del mercado. Los índices muestran un decrecimiento de Alibaba, pero se diferencia con el rendimiento de la firmas un año atrás.
Por ejemplo, durante este trimestre Alibaba ha tenido un gran impacto del covid-19. El personal de la compañía ha manifestado que las medidas de confinamiento son perjudiciales para una firma concreta, fundamentalmente en los meses de abril y de mayo.
Se espera que las compras de los consumidores incrementen en la parte final del trimestre. Explica Daniel Zhang, quien es consejero delegado, que “Hemos visto signos de recuperación en junio”.
La dinámica de ventas online en China, proyecta que el negocio local ha visto reducida su influencia. En lo que respecta a su división internacional, los ritmos de facturación suponen un 2%. Sin embargo, uno de los aspectos más resaltantes es que el mercado chino sigue teniendo un gran protagonismo en el nivel de ingresos (69%).
Durante los primeros tres meses del año, una de las cosas que han logrado solventar los efectos negativos de las cuentas de la compañía, es la nube. Se trata de un porcentaje de negocio que alcance el 10% en tasa interanual. No obstante, su beneficio en este modelo de negocios ha sobrepasado el 10% interanual. Pese a todo lo anterior, la rentabilidad neta se ha reducido al 53$, esto con respecta al año anterior.
Zhang estima que “En el trimestre pasado, nos hemos estado adaptando a los cambios macroeconómicos y nos hemos centrado en nuestra estrategia a largo plazo. Confiamos en nuestras oportunidades de crecimiento, en nuestra base de clientes, en nuestra resiliencia y negocio diversificado”
Desafortunadamente ha experimentado un 2022 con grandes cambios y transformaciones, esto dado por la existencia de un sector tecnológico cada vez más cabizbajo por el enorme déficit y endurecimiento de las medidas en política monetaria. La empresa posee un rendimiento negativo que ronda el 21%, perdiendo valor consecuentemente.
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Fuente: El Economista
Esta publicación fue modificada por última vez el septiembre 11, 2022 8:33 pm