Con las restricciones y después de dos años de excitación, han surgido diversas formas de venta digital que se han establecido ampliamente en el sector del lujo. En particular, la venta personalizada a través de videollamadas. Y, live shopping, una técnica de venta especial orientada a eventos que permite al comprador interactuar directamente con el vendedor-influenciador, fomentando las compras por impulso. Este método, muy popular entre los consumidores más jóvenes y especialmente en China, también ha empezado a desarrollarse en Europa, pero con distinto éxito.
Live shopping en Europa
El live shopping, un método de venta que existe en China desde 2013, ha experimentado un increíble crecimiento en el mercado asiático desde 2017. Y, crecerá a una tasa anual compuesta de alrededor del 280% hasta 2020, según un informe de McKinsey. Esta tendencia ha generado más de 300.000 millones de dólares de ingresos en 2021.
Frente a los 150.000 millones de 2020, y se espera que alcance los 423.000 millones este año. Con 900 plataformas dedicadas y más de 500 millones de seguidores. Louis Vuitton fue la primera casa de lujo en probar esta fórmula durante la pandemia de marzo de 2020 en la plataforma china Xiaohongshu, pero no hizo lo mismo en Europa.
Las casas de lujo siguen dudando sobre el nuevo formato, ya que temen cómo afectará a su imagen. Entre los que han optado por esta tendencia están las marcas de cosméticos, los grandes almacenes y los portales online. Por ejemplo, la plataforma francesa de accesorios de lujo Monnier Paris, pionera en este campo, se ha adherido firmemente a este modelo desde hace dos años.
“En China, compramos en línea todos los días con nuestros socios locales, Tmall y Douyin. Más del 10% de nuestras ventas se realizan a través de este canal en Asia”, dijo Diaa Eliakubi, director general de la tienda online.
