Las marcas necesitan una personalidad propia y es ahí en donde entra a tallar un Community Manager. El trabajo del Community Manager es realmente intenso ya que Internet nunca se detiene, es un trabajo de 24/7.
Es importante definir una personalidad de la marca, así como su voz y estilo, no se trata de publicar por publicar, un buen Community Manager debe basarse en estudios previos, análisis, conocer su comunidad y ser responsable de construir, gestionar y administrar la comunidad a cargo, porque viene a ocupar el lugar de un relacionista público virtual.
El Community Manager debe ser una persona que se ha tomado el tiempo de conocer muy bien a la marca, sus productos o servicios, pues no solo se encarga de publicar o responder comentarios, podrá ser capaz de identificar posibles leads y para ello debe tener clara la información pertinente.
Cada vez es más importante y necesaria la presencia de un Community Manager en las empresas, pues con el desarrollo tecnológico, estamos obligados a correr y permanecer en la lucha o desaparecer de la carrera.
El Community Manager como todo humano, comete errores, lo mejor es aceptarlos y pedir disculpas a la audiencia, evita borrar y pensar que todo seguirá como si nada, puede generarte graves consecuencias y llegar a perder credibilidad, basta que puedan darse cuenta, para que empiece una descarga de reclamos.
Un buen Community Manager, siempre debe responder como marca de la empresa, eso genera la parte íntima entre la empresa y el usuario haciéndolo de esta manera parte de la comunidad.